La cautela en el periodismo y en lo que comunico me resulta condición sine qua non para hacer periodismo. Los llamados del círculo íntimo de Félix decían que fue un accidente, que Félix perdió el conocimiento, que Félix no podía decir si el roce con la camioneta 4x4 negra había sido apropósito o no. Eso publique ayer. Eso que sabía de fuentes cercanas a Félix.
Triste fue confirmar, de boca de Félix Díaz, que sufrió un intento de asesinato. Otro más. Asesinato, ataque, atentado.
Hace menos de una semana escribía sobre el apriete al hermano de Luciano Arruga. Arruga, Félix. Todos nombres (y caras) conocidas. Vuelvo a decir, entonces, lo que decía tras el ataque a Mario Arruga. La impunidad por sobre la impunidad. La impunidad que sienten los policías que no dan su nombre, el cobarde que embiste a un hombre en moto y huye, en una tierra que es del feudo Gildo, aliado de CFK. No se entiende. Realmente no se entiende. O sí. Con estos amigos sigue buscando más amigos, Blaquier, Monsanto, Autoridades de la Barrick Gold... Mierda, qué manga de amigos y aliados.
Cuando estuve en Formosa en junio de 2011, para las elecciones de la comunidad (que ganó Félix, vale recordar), volví sorprendida y enojada con la impunidad a la vista de cualquiera. Como nos perseguían, enojados ellos, por los foráneos que iban a controlar que no haya fraude, nos filmaban, y aún con nuestra presencia (militantes de diferentes organismos de DDHH, periodistas, gendarmería, funcionarios del Ministerio del Interior, funcionarios provinciales, funcionarios del INAI, etc...) aún así, seguían repartiendo colchones, por ejemplo, en las 4x4 que llevaban el sticker de campaña: Gildo 2011-2015
Sepa usted, querido lector, que la seguridad de Félix Díaz y su familia, debe ser velada por el Estado Nacional, mediante la medida cautelar de la CIDH (abril/11). Sin embargo, hace muchos meses que no hemos visto a Florencio Randazzo -representante máximo del Estado Nacional que ha tomado esta causa con la promesa de resolverla-, ni al viceministro Barbosa. El Estado no está ocupándose del conflicto, y evidentemente, tampoco se está ocupando de la seguridad del líder qom.
Así como tampoco se ocuparon del caso Luciano Arruga, desaparecido hace 3 años y medio por la policía bonaerense (cuyos 8 implicados en el caso siguen trabajando en diferentes comisarías). Tanto no se ocuparon, que sus familias, que los luchadores que los acompañan, vienen padeciendo esta indiferencia del Gobierno Nacional. Vea usted, en un mes tenemos: 15/07: Ataque a la casa APDH La Matanza (que justamente acompaña ambos casos mencionados), 03/08: ataque al hermano de Luciano Arruga, 09/08: ataque a Félix Díaz. Todos nombres, personas, entidades, expuestas hasta las pelotas. Si están llegando a amedrentar estos nombres conocidos, imagínese la de perejiles que la están pasando mal en este momento no?
La impunidad hace estragos, en un país que comienza a hacer justicia de un genocidio ocurrido 30 años atrás, no se entiende. O sí.
La justicia vale en retroactivo, la lucha presente, como dijo Hebe, ya fue, "a este Gobierno no hay nada que reclamarle".
Sin embargo yo le reclamo, aparición con vida de Luciano Arruga, cárcel a los asesinos, esclarecimiento del ataque a Félix Díaz, la devolución de las tierras a los Pueblos Originarios que en el siglo XXI tuvieron que aprender a la fuerza sobre abogados y títulos de propiedad, cuando sólo piden su tierra para vivir en paz.
Estos dos casos que nombro son ejemplo de algo que sucede de norte a sur. El avasallamiento hacia las comunidades originarias y sus tierras, y la violencia institucional de las fuerzas de seguridad, el gatillo fácil, el reclutamiento de chicos para robar, y las desapariciones cuando, o dicen que no, o ya no sirven.
Fuerza al qarashé Félix, gran hombre y líder de sus hermanos. Por su rápida recuperación, ana añaxat, jallalla hermanos originarios!
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| Volante octubre '11. Peña en APDH. |
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