Seguro ya vieron la conferencia, o algún pedazo. Pero para que no nos gane el olvido inmediato, voy a transcribir unos breves fragmentos de lo que Scioli decía, con tono muy serio, el viernes pasado (27/11/09):
“Hay que avanzar en cercar, en acorralar a estos delincuentes, en llevarles adelante la mayor presión por parte del Estado y darles también herramientas a nuestra Policía”
"Con el transcurso de los años y el agravamiento de los delitos quedaron algunas figuras obsoletas con respecto a la realidad, por lo que son necesarias leyes más rigurosas que se encuadren directamente en estas conductas que estamos viendo sin precedentes en función de la irracionalidad que vemos entre la causa de movilidad de llevar adelante un robo y la manera brutal en que atacan a las víctimas".
"Las reformas deben alcanzar también al ámbito nacional, en especial en lo que al proyecto de ley de Responsabilidad Penal Juvenil respecta, una iniciativa que tiene media sanción. Esperemos que haya sanción definitiva para que quede claro que no es que un menor puede matar y no va a pasar nada. Porque si bien desde el Estado invertimos en educación, y tratamos de generar las condiciones para que esto no ocurra, cuando ocurra tiene que haber una respuesta del Estado.”
Nada. En nada estoy de acuerdo con el Gobernador. ¿Qué piensa el delincuente al escuchar palabras como "cercar", "acorralar"? Es fácil, piensa algo como... "Me están declarando la guerra, me están desafiando". Ahora, qué pensaría de un discurso un tanto más incluyente, a saber: "Hay que incentivar la ocupación, el deporte, la educación, los centros culturales, la inclusión de los pibes". Capaz que no se incentiva y dice, joya, mañana me convierto en Messi, pero al menos no están levantando una caza de brujas y profundizando la exclusión con la que ya nacieron.
¿Sabe dónde tiene que hacer la caza, Gobernador? Ahí adentro, a dónde va a meter más poder.
Esto dice Paggi, el jefe de la policía bonaerense, al respecto de las medidas sciociolanas.
Y así presenta Pág/12 la noticia:
Resalto la reunión entre Scioli y el viudo de la maestra... Ahora, Gobernador, y la familia de Luciano para cuándo?
El 31 de noviembre se cumplen 10 meses de la desaparición de Luciano, y no, todavía Scioli no recibió a su familia. Es más, están sufriendo amenazas y agresiones directas por parte de aquellos que hicieron de Luciano una incógnita. Aquellos a los que hoy nuestro Gobernador les deposita más poder.
Qué tan lejos les gusta andar de las soluciones bien pensadas...
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